Todas las de Amigas y conocidas (programa donde trabajó Alba Carrillo cuando iba de digna) están poniéndola verde. Que no tiene negocio alguno y que tiene que hacer el ridículo por pasta. Y los tenistas están molestos por decir que hay señoritas que les esperan a la salida de los torneos. A mí me ha parecido patética y mala, pero que se le siga yendo la olla, a ver hasta donde llega.