Pues yo tenía una cuenta conjunta abierta hacia mil años con una pareja mía y luego cuando ya lo habiamos dejado me empezaron a venir pufos suyos, de otras cuentas suyas que el banco chupaba de la nuestra conjunta.
Fui a cerrarla y me dijeron que nanai, que necesitaban las dos firmas de los titulares y que encima me iban a seguir viniendo pufos del otro titular... me tuve que poner como un energúmeno hasta que salió el director de la sucursal y tuve que firmar un papel como que esta persona se encontraba en paradero desconocido y así ya me cancelaron la cuenta y despues ya fui feliz y comí perdiz.