La clase obrera es más fea, más gorda, más tonta y llena de enfermedades. Nos dejan existir porque hay trabajos que los señoritos y las damas no tienen que hacer.
Bueno, yo ya no soy ni clase obrera, soy despojo social. Me ha llegado un SMS del Servicio navarro de Empleo que me aconseja que recalque en mi CV o carta de presentación que soy viejo (+45) y parado de larga duración (+ de 1 año). Se ve que a las empresas les dan subvenciones por contratar a parásitos sociales como yo.