Los wiwis son muy de cuanto más, mejor. De hecho, hoy critican a la croata por no hacer más cosas, usar más efectos o moverse más, imagino que usando cosas tipo Dima Bilan como referencia.
Está claro que si la canción es mala o plana, toca distraer al espectador; pero si es buena, yo soy más partidario de centrar la atención en el solista y olvidarse de artificios (como los Common Linnets en 2014).
Esta permanente batalla entre música y circo es de las cosas que más me gustan en el festival.