Sí ha merecido la pena. Ha habido algún que otro comentario jugoso, especialmente por parte de Álex Casademunts y los demás miembros de Fórmula Abierta. El Parreño también ha estado sincero diciendo que no pintaba nada con su estilo en OT. Geno y Verónica han enseñado que el triunfo de la noche a la mañana termina siendo efímero y no te lleva a ningún lado.
Las actuaciones han estado muy emotivas por la nostalgia que producen, y el hecho de volver a ver a Bisbal y Chenoa juntos en la misma habitación tiene su aquel, aunque se ignorasen cada vez que hablaban. Y ver a Rosa López de nuevo es muy emotivo, igual de humilde y sencilla que hace 15 años pero con una voz increíble y totalmente desaprovechada por la industria discográfica :(
Deseando ver el próximo episodio, a ver si rajan un poco más del formato ya que aún faltan por salir Javián, Nuria y Gisela, que creo por los avances que son de los que más se han "liberado".