Precisamente una auditoría para cuantificar cuántas personas quieren votar y no lo hacen por las dificultades que supone y cuántas quieren, lo intentan y no pueden porque el sistema falla.
Vamos, una medida del absentismo por trabas y de los errores que ha habido. Mientras se quede el asunto en casos puntuales que todos conocemos, poco se va a hacer.