A ver, no entendéis que Toñi en el fondo es una mandada. Todo esto viene de arriba, más concretamente de Soraya Sáenz de Santamaría, quien, en el marco de la Operación Diálogo, ha ordenado a TVE que el representante español de este año sea catalán sí o sí. De hecho, la cosa estaba entre Manel o Maika.