Sí, ya he visto varias advertencias en Instagram sobre el peligro de sobreponerse a una anorexia, por ejemplo, mediante el fitness y acabar convirtiéndolo en otra obsesión por el control (seguir contando calorías, aunque sea para comer más, medirse constantemente, cosas así). Supongo que aún así será dentro de lo que cabe más saludable, al menos para el cuerpo, pero ya para la cabeza...