A ver, es obvio que Lana tiene menos ritmo en el cuerpo que una puerta, hace movimientos ortopédicos la pobre. Pero no se, es parte de su encanto. A mi lo que me jode es que se pase media vida dando besitos a los de la primera fila, que son las mismas locas que gritan y no dejan escuchar nada. Estoy reviviendo el concierto y que corahe.