El humo se lo vendió el Vaquerizo. Cuando se vino a dar cuenta, ya contaba en un reality que era amiguísimo de ella. Lana se suicidó, asqueada de haber cometido el error de hablarle. La otra es que vio algo brillante en el agua, un plástico de un paquete de tabaco, pero era medio miope y perdió el paso.