Bueno, como han dicho, seguir viviendo de la música y derivados (juez o coach de un talent show, compositor, etc...) sí creo que es un triunfo. Está claro que no todos pueden ser superventas, sacar pelotazos y estar en la radiofórmula a todas horas. Si tenemos en cuenta de donde venían, pues más aún. OT1 fue un escaparate enorme para todos sus participantes y, como ya se vio en el reencuentro, casi todos siguen viviendo de la música/espectáculo/televisión.