Hard Candy, MDNA y Rebel Heart son infinítamente más pegadizos, completos, disfrutables y potentes comercialmente que LAP o COADF. Abarcan, potencialmente, una variedad de públicos más amplia. Si hubiera seguido la difusión mediática, fácilmente hubieran sido más vendidos, y por consiguiente más aclamados que aquellos. De hecho, tuvieron un éxito comercial mucho más meritorio, vendiendo increíble para la falta de apoyo, con MDNA siendo el álbum más vendido entre los artistas de su clase.
Para fracaso comercial el de Like A Prayer, que "sólo" vendió 12 millones cuando venía de vender unos 25 con Like A Virgin y True Blue, teniendo con Like A Prayer más apoyo mediático que nunca.