Lo que pasó con Nothing really matters en EEUU es que lo sacaron a la venta muy tarde. Hasta hubo protestas delante de Warner.
Es sin duda lo más comercial del album. Skin para los más techno.
Si la peluca está más o menos peinada, a mí me da igual.
Pero está claro que ese pelo platino revuelto es el guiño a su peinado más habitual de finales de los 80. Vaya drama, algunos.