Y puede que tenga razón en lo de la emoción, o que no terminan de estar relajados y que realmente, donde se sientan a gusto mostrándose tal y como son sea en la habitación, donde saben que no hay ni cámaras ni micros. En ese caso, que les den una charla (más tipo coaching) para que consigan olvidar que hay cámaras, que les motive a ser ellos mismos las 24 horas del día. Porque ya te digo yo que con una bronca así, difícilmente se van a relajar y disfrutar de la experiencia.