Menor sí, niño no. Un chaval de 17 años tiene muy poco de niño.
Yo comprendo la situación que se está viviendo y creo que hay varios focos de culpa:
Lo primero el negar que parte de estos centros de menores sean en muchos casos conflictivos y vender la imagen de chavales de 17 años inocentes y desprotegidos. Desprotegidos y marginados están por la situación de la que vienen, y eso es un problema de fondo que no se aborda por falta de medios y de voluntad política, pero eso no sirve de justificación para los que alguna vez han sufrido un percance por este motivo. El negar que se cometan fechorías por parte de algunos, y algunas de ellas con saña, es darle alas a los que van a señalar con el dedo y a demonizarlos. Y que en algunos barrios con centros de menores la vida se ha vuelto imposible, es también verdad.
Creo que el problema viene por no decir las cosas como son. Unos tienden a un blanqueamiento y a no hablar del tema por corrección política y esperar a que pase la tormenta, y otros a caldear el ambiente e irse al otro extremo dando palizas.
En Madrid hay grupos de menores magrebíes que se dedican a robarte el móvil. Decir que son casos puntuales y anecdóticos, es mentir.
A mí me lo han intentando robar dos veces en Lavapiés.
Una vez lo consiguieron, me fui detrás de él y después de seguirle como una lapa me lo acabó dando, eso sí; después de llamarme racista a voz en grito y que me mirase mal toda la calle. La segunda vez ya iba más alerta y le pillé con la mano en el bolsillo. Nunca antes me habían intentado robar nada.
Y conozco a pocas personas a las que no se lo hayan quitado o intentado quitar.
¿Qué se hace al respecto? Nada.
Como mucho si pasa la policía cuando te ha sucedido puedes tener suerte.
Yo aquí veo a unos menores aprovechándose de un sistema que les permite robar sin consecuencias y a unos extremistas que basándose en esto se vuelven locos para pegar a unos menores.