Para mí @Delapuert tiene toda la razón. Es inconcebible que una nación aconfesional como la nuestra, lo que significa que ninguna confesión tendrá carácter estatal, dedique ni un solo céntimo a subvencionar o financiar acciones que deben ser exclusivamente personales, y no solo en las circunstancias actuales, en que el dinero no sobra, sino en cualquiera de ellas.
Ni un euro para adoctrinar,financiar o subvencionar ninguna iniciativa que surja de una organización religiosa , sea la que sea. El estado debe mantenerse independiente de cualquier organización que se base en una creencia, una fe, o un sistema de valores doctrinal y basado en creencias religiosas.
Todo esto por no meternos en lo nociva y dañina que ha sido la iglesia católica en nuestra sociedad e historia, que ya es otro asunto. Bravo, @Delapuert