Spiriman es un circo de hombre, le pierden sus ansias de foquito. Lo que no quita que de vez en cuando lleve razón.
Yo tengo algunos familiares en residencias en Andalucía y, por lo que me cuentan, han extremado medidas y parece que las cosas se están haciendo con cabeza: no pueden recibir visitas, les organizan videollamadas con sus hijos, el personal que trabaja allí se toma la temperatura antes de entrar a trabajar y durante el turno, doblan turnos para que no haya demasiado trasiego de gente entrando y saliendo del centro a lo largo del día, y mantienen medidas de higiene y protección en todo momento. Evidentemente las desgracias pueden ocurrir, pero la medidas que han tomado me parecen correctas.