Miss A Thing está bien, pero no es lo que la locura de internet ha proclamado.
Habéis obligado a Kylie a destacar una canción que no estaba hecha para eso, que ni siquiera incluyó en ninguna presentación del disco, que tiene un estribillo pastelón y cursi hasta para el más mariquita, con unas estrofas sacadas de Lovefool de The cardigans, un instrumental simple y genérico oído mil veces, una letra anodina...
Y Dancefloor Darling, que sí ha cantado en Infinite y en programas de televisión, y es lo más potente, pegadizo, comercial y destacable, les pasa desapercibida...
Ahora sí, ella os lo paga con ese vídeo que no puede ser peor, que parece que ha hecho por obligación, para que no digan que no hizo nada por esa canción que le dieron un éstatus que no merecía.