Tenía que escuchar 45 minutos de Los 40 para entrar en un sorteo de una tarjeta regalo de 25 euros. Ese es el precio de mi dignidad, 25 euros. Y probablemente lo hubiera hecho por menos, que aquí principios los justos.
La encuesta era sobre la publicidad en los medios. Pero como soy mentalmente incapaz de atender a la publicidad, salvo la dichosa taza roja de JNSP que aún se me aparece en sueños, mis respuestas han sido un poco un cuadro.