LRS me llegó en el momento perfecto y lo disfruté al máximo tanto en disco como en los directos a los que pude ir.
no sé si por la resaca de ese periodo y porque no se puede repetir lo irrepetible, el caso es que LPM se me agotó muy rápido.
y mira que más de la mitad del disco son grandísimas canciones, pero nunca lo he podido escuchar del tirón y casi siempre acababa pasando de los chicos malos hoy asaltan la pista a colisión inminente o al estilo filadelfia de la polinesia meridional y ya.
pero que conste que sigo siendo fan.