Al protagonista le han encomendado evitar que se lleva a cabo una misión por la cual quieren secuestrar o matar a Britney. Es el icono de la América contemporánea, con sus luces y sombras, y un grupo islamista le sigue la pista desde hace años. El tío se adentra en los círculos de paparazzi, en la vida diaria de Britney... El estilo está a caballo entre Houellebecq y Beigbeder, aunque sin el odio hacia el ser humano del primero. Es una novela muy francesa. Y la relación establecida entre funcionamiento político y vida popular es muy buena. No es una lectura ligera, aunque tampoco demasiado pesada. A mí me ha chiflado.