[Foto: http://mrpeabody.buzznet.com/user/]
Contempopránea 2006 presenta… Una sensación de felicidad me invade año tras año (y ya van seis consecutivos) cuando escucho en Alburquerque (Badajoz) la ya habitual frase con la que abren, a modo de breve presentación, cada uno de los conciertos de Contempopránea, para mí el mejor festival de música indie del periodo estival. ¿Motivos? Unos cuantos…
1- El encanto de la gente del pueblo y del recinto de conciertos situado en la ladera del castillo. Frente al asfixiante calor de otros festivales, es un gusto bailar a temperaturas como las de Alburquerque, aunque luego te mueras de frío en el cámping (para otro año cae una manta seguro en el equipaje).
2- La fiesta en la plaza de los jueves que da la oportunidad de conocer nuevas bandas como Pequeño Tío, Diane o Supersonic (un saludo para ese socorrista de moda y para el auténtico Franz Ferdinand de Badajoz) con ese postparty tan genial en el Mari Pili (un 10 para la pinchada de Dj Pomme-Lux(e) al que lamentablemente le cancelaron su sesión del sábado). Por cierto, ¿dónde estaban los Dorian Dj’s?
3- La amabilidad de cada uno de los integrantes de la organización, camareros, seguridad… Un gustazo. Gracias. La ausencia de colas y masificación tan asquerosa que hemos sufrido en otros festivales.
4- Un público indie capaz de chuparse cientos de kilómetros y 40 grados a la sombra para ver en directo a sus grupos favoritos. ¡Venga! Bien por los nuevos baños del cámping, aunque esperemos que haya más sombras la próxima edición.
5- La cara de felicidad de los asistentes escuchando a La Buena Vida (como hace un par de años). Enhorabuena por volver a confiar en ellos como cabeza de cartel. Qué gran disco es ‘Vidania’ y qué bien suenan en vivo.
6. La locura colectiva de los ‘contempopraneos’ que casi levitaban al son de los hits de La Casa Azul, en el show más petardo que jamás haya visto por parte de Guille Milkyway.
7. El conciertazo de Niños Mutantes, que sólo puedo comparar con el de El Columpio Asesino en el FIB. Aún me emociono al recordarlo…
8. La confirmación de uno de los mejores directos de la escena indie por obra y mérito de Clovis. Qué bien canta Cris, qué potencia en directo y qué grande es Fino (¿para cuándo un homenaje a Los Enemigos?).
9. La revelación tanto de Underwater Tea Party como de Nouvelle Cuisine, que se comieron el escenario y que tienen un más que prometedor futuro. Apuesto por ellos.
10. La calidad del sonido que, a pesar de la ausencia de Carlos Hernández, estuvo a la altura en todos los conciertos.
11. ¡Qué bien y qué barato se come en Alburquerque! ¿Será la calidad de su comida el motivo de que las chicas de la provincia sean tan guapas y divertidas…? Un saludo para la plantilla del Elefante Sónico. Unos profesionales.
12. Es un gusto escuchar en directo a grupos como Montevideo, Ama, Bloomington, Tarik y la Fábrica de Colores, Humbert Humbert o Second, entre otros, que apenas tienen cabida en otros festivales, que se olvidan de los grupos españoles.
13. The Sunday Drivers, ya con toda la potencia de sus guitarras, mucho mejor que en el FIB. Buena idea, por cierto, lo de las ruedas de prensa en el Ayuntamiento y no detrás del escenario.
14. Tachenko, ¿por qué sois tan grandes? El público los eligió, junto a La Casa Azul y La Buena Vida, como los grandes triunfadores de Contempopránea. Y realmente lo fueron.
15. Sólo en Contempopránea se puede vivir un momento tan intenso y mágico como el de la invasión de la piscina a las 16.30 horas del sábado como protesta de la obligación de comprar gorros para bañarse. Aunque seguro que no hizo mucha gracia a la organización, ninguno de los allí presente pudo dejar de sonreír y seguro que nunca olvidaremos esos minutos. Oé, oé, oé…