El simpático, ocurrente y dicharachero Carlos Latre se convierte en ‘El mundo de Chema’ en un pesado, sin sentido del humor, con chistes del año de la tos y que ha visto demasiadas películas de Pajares y Esteso en un abrir y cerrar de ojos. La serie es, definitivamente, muy mala. Las risas enlatadas no ayudan a que el telespectador se ría con unas bromas que parecen de parvulario o que ya has oído en alguna otra sitcom de mayor calidad hace años (un ejemplo muy gráfico es el de “cómo me voy a fiar de ti si tú fuiste uno de los que apostó por el Laserdisc”). Los actores son pésimos, parece que están recitando el guión más que interpretar un personaje, y a veces se nota que ni ellos mismos se creen lo que están diciendo. Con respecto a la historia… en fin, que los guionistas no le han dado muchas vueltas al argumento porque el resultado es tan flojo y tan carente de interés que no te enganchas en absoluto. ¿A quién se le ocurre que para pagar una hipoteca le alquiles tu casa a un montón de frikis? Ya sé que es ficción, pero ese punto de partida, bien planteado, podría dar lugar a una serie muy divertida. Sin embargo, en el caso de ‘El mundo de Chema’, es un completo fiasco. Por favor, que Cuatro retire esta aberración porque vamos a pensar que no es la cadena de las series buenas, como yo pensaba que era. 2