La cosa es que la mecánica del programa no tiene gracia, es lenta, es sosa. En otros programas también puede parecer a primera vista que es una cosa aburrida, pero en el fondo tienen algo de suspense. Este, carece de lo más mínimo. Y encima, el presentador va de gracioso cuando no tiene ninguna gracia, ni mala ni buena.
Sin embargo, por muy cutre que pueda llegar a parecer, siempre hay algo que es peor. Lo primero, los continuos fallos de Sobera, que le daba el turno a quien no correspondía y tenía que corregirse después de la respuesta (!). Y desde luego de los concursantes, quienes escribieron con muchísimo arte los nombres de «Julieta Benegas» y «Chabela Vargas». Vale que los nombres propios se puedan escribir más relajadamente pero… Vaya tela.
Calificación: 0/10
Destacamos: Lo tontísimo que es Carlos Sobera.
Te gustará si te gusta: Pasar el rato frente a la televisión, haya lo que haya.
Predictor: Yo espero que lo quiten mañana, para que dejemos de sufrir.