‘Herederos’ cierra la temporada, como todo buen culebrón, con un montón de incógnitas y secretos por desvelar. Tardé en engancharme unos tres capítulos, pero la tensión que me ha provocado y el vilo en el que ha conseguido mantenerme hacía mucho que ninguna otra serie lo conseguía. Si os habéis perdido capítulos, aún no es tarde, puede seguirse desde el canal de RTVE en YouTube. A continuación, unas cuantas razones por las que ‘Herederos’ me tiene tan enganchada y, sin llegar al nivel de otras, se haya convertido en una señora telenovela.
10.- Un clásico: el amor imposible entre distintas clases sociales.
9.- La vulnerabilidad del poder y el estatus social: hoy se tiene todo, mañana nada.
8.- El negocio familiar. Ni cafetales ni revistas de moda: producción de aceite, ganadería y toreo.
7.- Enfermedades degenerativas o terminales que hacen que la trama se complique en cualquier momento.
6.- Confusos lazos familiares: padres adoptivos, hermanos que en realidad son hijos…
5.- Delitos cometidos por los protagonistas con la constante amenaza de la cárcel