El texto de Álex de la Iglesia se refiere a un artículo publicado el 21 de mayo, firmado por Javier Martín. Se citaban algunos ejemplos de películas españolas que no se han estrenado o no han llegado a ver ni siquiera 100 personas y se dejaba caer que parece que se hace cine para recibir subvenciones. Aquí van algunos fragmentos de la carta de respuesta:
Hacer una deducción directa que lleve a la idea de que en España «igual se hace cine como se cultivaba el lino, para recaudar subvenciones, aunque luego ni se recoja el lino ni se proyecten los filmes» (sic) es un argumento absolutamente demagógico y falaz que no responde a la realidad de un sector que es mucho más complejo y que sin duda está necesitado de un proceso de profunda reconversión. Por cierto, un sector mucho menos subvencionado que casi cualquier otro sector productivo en este país, como, sin ir más lejos, el de la prensa. Basta para comprobarlo contabilizar la publicidad institucional que albergan sus páginas.
¿Cree usted que se pueden sacar conclusiones sobre la baja asistencia del público al cine español sin analizar antes dónde se encuentran las dificultades de acceso real de las películas españolas a sus espectadores naturales? Creemos que no se puede afirmar impunemente que no hay pantallas suficientes para el cine español sin echar antes una mirada a sus propias páginas de Cartelera y constatar que algunos títulos (casi todos americanos) sin más prueba de talento que la publicidad que les precede ocupan 50 pantallas sólo en Madrid. Nos ponemos a disposición de sus redactores para poder explicarlo. Aunque suponemos que ellos ya lo saben todo. Otra cosa es que no lo cuenten».
Si es usted artista y tiene algún problema con el diario, la verdad es que es el momento de mandarles otra cartita.