El NME recogió ayer estas declaraciones del hermanísimo, decepcionado con el concierto de Oasis del pasado jueves en el FIB. En el blog de la banda dice: «¿Benicassim? ¡Vaya una puta pérdida de tiempo! De no ser por los chavales habría sido un desastre. No tengo palabras para describir lo del público. Un comportamiento increíble. Especialmente por las chatis haciendo topless, ¡menuda vista de bienvenida!». Y sigue «El problema fue… ¡Sí! ¡La puta amplificación! ¡Petó dos veces! ¡Y los monitores también, dos veces!». «Esto se está convirtiendo en una broma, y no de las divertidas…» añade, probablemente en referencia a varios shows recientes en los que han tenido problemas similares, en Manchester y en el mismísimo Estadio de Wembley.