Esto es un ejemplo de cómo una banda se termina peleando con su sello estadounidense. ¿Pensaban que íbamos a aprobar esta mierda?
Sucios c*brones. Estúpidos arrogantes hijos de p*ta gilip*llas con cerebros de cerdo. Antes me comería una boñiga que una de sus hamburguesas de mierda.
En realidad no estoy cabreado con McDonald’s. No son más que otra multinacional psicopática. No más malvados, pero tampoco menos.
La multinacional psicopática con la que estoy enfadado es Sony, que posee Epic, quienes lanzan nuestros álbumes en América. Pero no estoy muy sorprendido.