El clip ha sido filmado en París. El francés Baptiste Blanpain ha trabajado en la televisión francesa y con marcas de cosmética internacionales y está especializado en efectos visuales. Cuando La Prohibida le propuso dirigir su nuevo videoclip aceptó sin dudarlo. «Me gustó el desafío que representaba, dar una imagen a una excelente canción electro-pop sin imponer ninguna interpretación del título. Consecuentemente, he eligido hacer un decorado sencillo, en oposición al ritmo loco de la canción (…). La idea principal era dar a La Prohibida espacio para que pudiese expresarse, para que cautive al espectador, y que le arrastre a su universo. Debía quedarse en el centro del vídeo, delante de todo, en sus gestos, su silueta, sus movimientos; era el decorado el que tenía que adaptarse a ella y no al contrario: La Prohibida es una cantante con una identidad visual muy importante, siempre ocurre algo increíble cuando está en un escenario o frente a una cámara, y es lo que quise mostrar».
Finalmente, mostrando el lado oscuro del decorado y el fondo verde, el director quería «nublar las pistas de interpretación, enseñando que todo el decorado del vídeo no pretende ser real, asumiendo el 3D, enseñando el universo de La Prohibida como un sueño, una fantasía pop abierta a todo tipo de interpretación». La nota de prensa concluye: «La única cosa real, es La Prohibida en sí, icónica, viva y múltiple, así se ven dos Prohibida al final, como en el vídeo». El diseño de la ropa de La Prohibida es de Eric Tibush Couture y Carlos Díez para el otro.