Teresa y Luis abrieron la noche y, desde el principio, mostraron que el entorno más íntimo de la sala les favorece muchísimo más que el del Ocho y medio, donde habían tocado semanas antes. Los de Logroño sonaron espléndidos en temas clásicos (‘A ver si nos vemos’), brillaron especialmente en los nuevos (‘Las voces’) y dejaron claro que merecen ocupar un lugar entre los grupos más destacados del panorama nacional tanto por sus letras como por su interpretación.
Tras Espanto, llegó el turno de La Ruleta China. El Zurdo apareció acompañado de Charlie y Clara y ofreció un concierto impecable. Las nuevas canciones (tocaron cinco o seis), que aún no sabemos cuándo se editarán en Siesta, siguen la línea melódica y elegante marca de la casa, que podemos escuchar en ‘Con Paciencia’, la canción que hace algunas semanas encontrábamos en el blog La Nadadora
.Junto a ellas, nos regalaron versiones emocionantísimas de temas propios y ajenos. Si dichas versiones ajenas de Pegamoides, Patty Pravo y Kevin Ayers destacaron, lo hicieron aún más las propias. Así, ‘Las vírgenes Shibuyas’ mejoró incluso la versión que habíamos escuchado en ‘Al galope‘ y el cierre con ‘El cualquier fiesta’ de La Mode supuso un punto y final muy a la altura de una noche sobresaliente.
Foto: Rosa Ponce para La Fonoteca.