Todo el mundo os pregunta por cómo vais vestidos. ¿Hasta qué punto controláis vuestra imagen? Vi un vídeo en la tele alemana en el que os enfocaban desde arriba y se veían los detalles de vuestro peinado. ¿Pedisteis vosotros o vuestro equipo a realización este tipo de planos?
No, pero sabemos a qué te refieres. Fue lo más extraño del mundo (risas). Fue cosa del programa. Nosotros estábamos concentrados en la canción, así que no teníamos ni idea de lo que iba a decidir la realización. Hubiéramos preferido que sacaran más a las chicas.
¿Qué ha pasado en Alemania? ¿Cómo es que os habéis hecho tan famosos allí?
No tenemos ni idea, en serio. También hemos ido mucho allí, quizá es eso. Es sorprendente, cada vez que vamos para nosotros es como ‘El Show de Truman’, todo el mundo nos reconoce y es algo surrealista. Es decir, estamos muy agradecidos de la reacción que ha tenido allí la gente con el disco. Es sólo que no nos lo podemos creer.
En cambio en Estados Unidos habéis recibido una atención mínima. ¿Vais a ir de gira o tenéis algún plan al respecto?
Esperamos que sí, en abril, pero no tenemos ni idea de lo que va a pasar.
Quizá no están tan acostumbrados a los sonidos oscuros que manejáis como en Alemania.
Pero en cambio les encantan las baladas. Gente como Timbaland, en la producción, también ha hecho cosas que consideramos cercanas. Tal vez funcione o tal vez no.
¿Os consideráis un grupo alternativo?
No mucho. Todo se reduce a que hacemos música pop. El tipo de música que hacemos puede tener algo de alternativo, pero demográficamente la gente que viene a nuestros conciertos suele tener 16 años.
¿Pero os suele gustar la música que se considera «alternativa»?
¿Alternativo cómo qué?
Como The xx.
Sí, pero bueno, también creo que Depeche Mode, Prince… ese tipo de gente rompió la línea entre lo que es alternativo y lo que no. Y es donde estamos también nosotros. Oasis fueron tan famosos…
Hacía un montón que no escuchaba un disco con tantísimas baladas que me gustara, ¿escucháis muchas baladas?
Sí, en los 90 oíamos muchísimas. ¿Recuerdas aquel tipo de canciones que eran número 1 durante semanas y semanas? Solían ser canciones así. Los 90 fue una década de grandes baladas, y han sido una influencia. También gente como Spector, Roy Orbison… Tenían un punto cinemático que nos gusta mucho.
Spector es citado por todo tipo de artistas, pero también creo que os gustan cosas más pop que no son citadas tan a menudo como influencia. ¿Es así?
Take That en Inglaterra estaban por todas partes, pero nos referimos sobre todo a los clásicos. Nos han influido mucho más de lo que creemos. De repente, nos encontramos con que nosotros somos buenos haciendo este tipo de canciones. Antes de ponernos a hacer el disco, no pensamos que pudieran salirnos tantas. Nunca esperamos componer tantas baladas.
La escena de Manchester se ha caracterizado por el sonido Madchester, los Smiths… cosas que no tienen nada que ver con vosotros. ¿Cómo recordáis la ciudad cuando erais adolescentes?
Manchester ha contenido cosas muy diferentes en realidad: Joy Division, Morrissey… Ahora es muy diferente. No es que la escena sea deprimente porque no haya tantas cosas excitantes. Diríamos que ahora es bastante glamourosa.
De no haber cantado Kylie en ‘Devotion’, ¿quién lo habría hecho?
Nadie. El disco ya estaba acabado cuando se nos ocurrió. Pensamos que si hubiera dicho que no, la canción habría quedado como estaba.
Cada canción del disco está asociada a una imagen en el libreto. ¿Qué imagen de las que os han hecho es de vuestras favoritas?
Adam: «Qué interesante… Déjame el libreto (…) Quizá la de ‘Illuminated’. Es una pintura que hicieron para nosotros, creo que mola bastante».
Theo: «‘The Water’, para mí es la mejor».
¿Qué opináis de ser teloneros de Scissor Sisters? No os pegan tanto…
El primer disco es muy bueno. Fuimos a verlos una vez. Nos encantaba ‘Mary’.
¿Creéis que a su público le gustáis?
Los sitios en los que tocan son una estupenda oportunidad para nosotros. En Inglaterra son muy grandes.
En Spotify hay una audionovela vuestra con distintos finales, ¿de quién fue la idea? ¿De qué va la cosa?
Tienes que descubrirlo tú, hay un montón de finales diferentes. Lo escribió un amigo (Joe Stretch).
En los créditos del disco aparece la oficina del paro, ¿y eso?
Porque nos dieron dinero, nos daban una cantidad por semana, así que sin esa ayuda, nunca habríamos podido hacer un álbum.
En la producción de ‘Happiness’ no hay grandes nombres, ¿no os habría gustado trabajar con alguien para lograr un tipo de sonido?
Nos gustaba la idea de hacer el disco nosotros, tener nosotros esa oportunidad. A cuanta más gente metas, menos tuyo es el proyecto. Hemos trabajado con gente que conocemos. Queríamos gente auténtica y cercana. A la hora de escoger gente puedes meter a cualquiera, pero nosotros preferimos ir trabajando en nuestro propio sonido y al final hemos dado con algo que nos gustaba mucho nosotros solos.
¿Qué canción ha cambiado más en el proceso?
Adam: ‘Evelyn’, además es mi favorita del álbum.
Muchas canciones parecen hablar de religión o muerte, ¿es la temática del álbum?
Hay un elemento de eso, quizá. Es algo en lo que no piensas mucho. Nos preguntaron en una entrevista por qué la palabra «guerra» aparecía en tantas de nuestras canciones y ni siquiera nos habíamos dado cuenta.
Usáis el Twitter para decir todo tipo de cosas, entre otras, insistir en lo que os encanta España. Todo el mundo lo dice cuando viene, pero en vuestro caso parece de verdad, ¿por qué es?
Sí, porque hace calor. Nunca habíamos estado antes. El concierto que hicimos en Madrid fue uno de los mejores y el de Barcelona también.
¿Disfrutasteis el primer show en Charada? El sonido no fue muy bueno…
Fue genial. Quizá técnicamente pudo haber sido mejor, pero había un buen ambiente y unas luces de neón en el techo, lo cual nos gustó mucho.