Bares precintados, multas de hasta 6.000 euros por sobrepasar el límite nocturno de decibelios permitidos e, incluso, penas de cárcel. La condena a dos años y medio de prisión al regente del club de jazz «El Secadero» por la emisión de ruidos por encima de lo permitidos desde la apertura del local en 1994 ha prendido la mecha de un descontento generalizado en la tierra de Enrique Morente.
«Si se vanaglorian de los grupos granadinos que triunfan en todo el país y de los artistas que influyen en los más jóvenes; y si están orgullosos de que hubo un tiempo en el que Granada fue conocida internacionalmente como la ciudad de la música, tenemos que hacerles entender que nada de eso es posible sin un tejido de base que no podemos permitir que se destruya», señala el manifiesto difundido por la plataforma ‘Granada en Off‘, que reivindica la música como forma de cultura.
Por ello, grupos como Lori Meyers, Los Planetas, Lagartija Nick, Niños Mutantes, Bisagra, Chorrojumo, Demiurgo, Elastic Band, Eskorzo, Hora Zulú, Jean Paul, Napoleón Solo, Paco Chica y los Chicos del Coro, Plastik Frostik Machine, Los Portazos, El Puchero del Hortelano, Red Soul Community y Son de Nadie actuarán este martes a partir de las 16.30 horas en el recinto de Ifagra para defender la música en vivo en una ciudad que ha proclamado con voz propia que el pop corre por sus venas.
JENESAISPOP se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento de Granada y con la Consejería de Cultura sin obtener una explicación clara de la raíz del conflicto. «No tenemos constancia de la celebración de ningún macrofestival este martes», señalan desde la Consejería de Cultura. Cuando les preguntamos sobre el «atropello» a la actividad musical que se ha venido produciendo en la ciudad en los últimos meses con multas de hasta 6.000 euros a los dueños de locales y precintos de equipos de sonido a pubs como Sugarpop, no nos contestan.
Los músicos alzan su voz y reivindican que «la música es cultura» con un festival que busca dar salida a una situación que califican de «adornecimiento cultural». Cortar las alas de una industria que ha puesto a Granada en el punto de mira del panorama musical. O peor aún, convertir un enclave referente en una «ciudad triste sin oportunidades para la música», señala Noni López, cantante de Lori Meyers, a Europa Press, declaraciones recogidas por medios como 20 Minutos.