1.-‘Mecano’, el disco: A pesar de los aciertos salteados en su carrera posterior y de lo que se desarrollaron como artistas, Mecano pertenecen a ese tipo de grupos que nunca logró igualar la frescura y la espontaneidad de su disco de debut. Este ‘Mecano’, con canciones instrumentales como ‘Boda en Londres’, es uno de los mejores álbumes neo-románticos que se hicieron en nuestro país. Incluye clásicos del pendoneo y la holgazanería como ‘Hoy no me puedo levantar’, ‘Perdido en mi habitación’, ‘Me colé en una fiesta’ y ‘Maquillaje’, junto a otras canciones que ya apuntaban otras ambiciones, como ‘Sólo soy una persona’, y joyas perdidas como ‘No me enseñen la lección’.
2.-Las canciones de José María Cano para ‘Entre el cielo y el suelo’: El cuarto disco de Mecano es el que claramente supuso un antes y un después en su carrera. Más que por las canciones de Nacho, que seguían cierto continuismo, destacaban las cuatro de José María, que terminaron siendo cuatro de los cinco singles (el primero fue ‘Ay, qué pesado’). ‘Hijo de la luna’ podría haber estado incluida en el ‘Romancero gitano’, ‘Cruz de navajas’ mostraba su habilidad definitiva para las canciones costumbristas, ‘Me cuesta tanto olvidarte’ era uno de sus mayores logros atemporales y ‘No es serio este cementerio’ continúa siendo su canción más ácida y negra: «Luego en plan señorial, el panteón familiar de los duques Medina y Luengo / Que aunque el juicio final, nos trate por igual, aquí hay gente de rancio abolengo».
3.-‘Aire’: Como antecedente de las grandes canciones que haría para el siguiente disco, José María hizo este tema para ‘Ya viene el sol’, también en principio muy poco pop, que a mis cuatro o cinco años, supuso mi primer contacto con el surrealismo. Uno de mis primeros recuerdos musicales es la extrañeza que me generó esta canción, de rara ambientación y arreglos orquestales, que hablaba sobre algo tan intangible como un trozo de aire que decidía salir de paseo. Muy grande a pesar de algún ripio como «no faltéis al funeral».
4.-‘Naturaleza muerta’: Quitando el exceso de arreglos en la parte final, demasiado pomposa, esta canción incluida en ‘Aidalai’, su último disco, es perfecta. El regreso de las historias que comienzan por la cotidianeidad para terminar por la grandilocuencia de la relación de una mujer con elementos no humanos muestra a los Mecano que saben contar historias, de nuevo, en su momento más agraciado.
5.-Los temas de corte social: Prueba de que incluso en sus días de decadencia tenían sus aciertos, ‘El fallo positivo’, también de ‘Aidalai’, muestra la manera nada obvia ni excesivamente dramática en que se acercaban a un tema tan espinoso como el sida, aplicando un doble estribillo que se movía entre lo synthpop y la balada. Aunque hoy demasiado denostada como himno bóller, hasta el punto de que es imposible escucharla sin esbozar una sonrisa hasta paternalista (?), hay que reconocer el carácter de clásico también de ‘Mujer contra mujer’, atrevido tanto en lo musical como en lo lírico para las radios de 1988.
6.-Las canciones más industriales: Todo el mundo acusaba a Mecano de ser unos pijos disfrazados de modernos, pero si nos atenemos a su sonido, lo cierto es que rozó la dignidad internacional en multitud de ocasiones: ‘No pintamos nada’ y ‘Japón’, con sus letras cantadas de forma casi ininteligible mientras mandan en el sonido un cruce de todo tipo de sintetizadores, conforman junto a ‘El amante de fuego’, una vertiente ligeramente más oscura.
7.-Las baladas sencillas y directas: En contraposición a ese lado moderno de hombreras que se asocia a Mecano, queda una lista de canciones sencillas y acústicas, que no cuentan historias tan complejas como las apuntadas en puntos anteriores, pero que llaman la atención por su honestidad. A este grupo pertenecen ‘Tú’ o ‘Quédate en Madrid’, una de las más Vainica Doble que tienen. Ambas son, naturalmente, de José María.
8.-La recreación en el pop: A Mecano no se les puede echar en cara no haber escrito sobre la realidad. Sus canciones están llenas de referencias pop como las discotecas, el maquillaje, Signal o las Rebajas. ‘Busco algo barato’ sería una de las más evidentes.
9.-‘Abracadabra’: La cantó Alaska, pero este clásico de la televisión, indisociable de ‘La bola de cristal’, fue escrito también por José María. La lista de elementos relacionados con la carrera de Imagen y Sonido es hilarante y el «zoom, zoom», el mejor «lalala» o «parapapá» que se podía aplicar en un tema tan técnico.
10.-‘El uno, el dos, el tres’: Como sucede con el último disco de R.E.M., el último disco de Mecano contenía también un guiño más que claro a su inminente separación, quizá porque por aquella época ya estaban muy lejos de soportarse en plena lucha de egos. Es bonito que de todo el dolor o la ira que pueda envolver una separación supieran sacar un tema tan delicado como este: «Y quizá volvamos al local a cantar para nosotros, lo de ‘Hoy no me puedo levantar’, y dejar que esa chorrada nos empañe la mirada. Lágrimas de agua pasada, despintando la fachada».