No es este el primer material que publica Ramona Gonzalez, pero sí se trata de su primer trabajo memorable, en el que reúne con mayor seguridad un puñado de buenas canciones. Son cortes que pasean por un bosque de sintetizadores, cajas de ritmos o percusiones en los que la voz de la californiana marca una trayectoria entre el funk de salón y el synth-pop atemporal.
Del mismo modo que los directores de cine recurren una y otra vez a sus actores fetiche, incluso para interpretar personajes muy dispares entre unas películas y otras, consiguiendo en algunos casos excelentes resultados, en ‘One Second of Love’ se vislumbran desde los primeros acordes a varios actores de un revival de tendencias ochenteras que a lo largo del tracklist toman diferentes formas.
Este pretexto argumental implica ciertos riesgos, como el abuso de una década con demasiado peso ya en la actualidad. Pero lo que para unos puede ser una objeción, para nosotros en este caso supone el placer de desmenuzar una trama interpretada por la sobriedad de Bryan Ferry, la elegancia de Sade o, citando algo más reciente, el protagonismo melódico de Dan Bejar en Destroyer. Y es que ‘One Second of Love’ termina de evitar monotonías gracias a la divertida canción titular, con un vídeo que le sienta como un guante, o a la balada pop ‘In the Dark’. Por si su gama de registros no fuera suficiente, Ramona Gonzalez tiene pensado interpretar el próximo 1 de junio en el Ford Amphitheatre de Los Angeles íntegramente el ‘Computer World’ de Kraftwerk (aunque no será la primera vez), en una velada organizada por el Instituto Goethe y Dublab en la que se rinde homenaje a la música alemana.
Calificación: 7,7/10
Lo mejor: ‘In the Dark’, ‘One Second of Love’, ‘Autograph’, ‘This Story’.
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