POP ETC / POP ETC

Después de dos discos, The Morning Benders se enteraron de que su nombre significaba algo así como «los maricas mañaneros» en Gran Bretaña y en parte de Europa. Es por eso que, bastante consternado, Chris Chu decidió que había que cambiarle el nombre a la banda. Aunque la cosa no quedó (ni muchísimo menos) en un simple e inocente cambio nominal. Parece que, aprovechando esta circunstancia, el grupo decidió hacer algún ajuste más y dar un giro radical a la forma en la que sonaban. De un pop guitarrero con influencias interesantísimas de los años cincuenta o el indie tradicional han virado hacia el synthpop más edulcorado que puedas imaginarte. Canciones no aptas para diabéticos. En serio.

Es tan acusado el cambio en ‘POP ETC’ que hasta cuesta creer que los de Chu no hayan aprovechado también para vender este nuevo LP como un debut. Pero no, para ellos es el tercero, y echando un poco la vista atrás, uno lo entiende todo: la maldición del tercer disco. Ya sabéis: cuenta la leyenda que, después de dos primeros discos más o menos exitosos, una banda cualquiera tiende a hacer un tercero en el que demuestra que no sabe por dónde tirar. O por lo menos, que decepciona a gran parte de sus seguidores. Y muchas veces es precisamente porque se intenta romper con lo que se venía haciendo hasta ahora con la intención de evitar un continuismo excesivo.

Hay dos obvios resultados para este tipo de exploraciones: o salen bien o salen mal. Eso sí, cuando a un grupo le da por explorar nuevos sonidos y cambiar radicalmente, siempre hay que aplaudir la valentía de sus miembros. En ese sentido, POP ETC tienen todo nuestro respeto, por haber decidido zambullirse en el terreno del pop con mayúsculas, un género en el que han mostrado ser de lo más abiertos (ejemplo 1

, ejemplo 2). El motivo de este cambio, en palabras de su líder, no es otro que el de aflorar algunas de sus influencias musicales, que hasta entonces habían permanecido ocultas en sus anteriores trabajos. Y además cita varios ejemplos claros: Boyz II Men, Cyndi Lauper y Madonna. Ahí es nada.

¿Qué ha salido de todo esto? Pues un disco que suena como una copia de Owl City… o como si a fun. les hubiesen dado el Auto-Tune de Kanye West y los instrumentos de The Postal Service. ‘POP ETC’ es un compendio de once canciones buenrollistas, coloristas y luminosas, todas coronadas por la voz de Chris Chu, que ahora suena más suave que nunca. ¿Es tan malo el álbum como para darle tanta cera? Pues siendo sinceros, todos sabemos que no, pero la cera es más que comprensible: pese a que el continente es precioso (empezando por la portada, que de puro sencillo es genial), el contenido está tan vacío que ninguna canción se te quedará en la memoria ni te provocará ni una sola emoción. De hecho, cuando termina ‘POP ETC’, uno no sabe si realmente ha escuchado lo nuevo de «Morning Benders»… o no.

Calificación: 5/10
Lo mejor: ‘Halfway To Heaven’, ‘Live it Up’.
Te gustará si te gustan: Owl City
Escúchalo: en Spotify