Con tanta sorpresa de por medio, el nuevo álbum de estudio de Paul podía abarcar casi cualquier género entre la electrónica, la psicodelia y el rock and roll, pero al final McCartney parece que sólo se suelta la melena cuando no prosigue estrictamente con su carrera en solitario, pues en ‘New’ trae bajo el brazo, una vez más, una colección de canciones que en gran medida volverán a contentar a su público de toda la vida, el mismo que espera oír retazos de los Beatles, Wings y de álbumes en solitario como ‘McCartney’ (1970) o ‘Ram’ (1971) en cada nuevo trabajo del de Liverpool. Sin contar sus experimentos sinfónicos (Ecce Cor Meum, 2006) o su álbum de versiones de standards del jazz (‘Kisses On The Bottom’ (2012)), Paul ha sido casi siempre fiel a un sonido y a una manera de hacer canciones y este nuevo trabajo, para bien o para mal, es 100% McCartney. Por lo menos, y a diferencia del citado ‘Memory Almost Full’, gran parte de las canciones de ‘New’ suenan algo más inspiradas, hechas con más ganas y no por la mera excusa de seguir en el candelero. Hay una energía tras el single ‘Queenie Eye’
, con su clásico sonido de pop-rock con el piano dominando y otros cortes como ‘Everybody Out There’ (buen trabajo con las acústicas) o ‘Save Us’ que parecía desaparecida, además de poseer melodías y giros efectivos y pegadizos.Salvo el traspiés que supone ‘Appreciate’ y su intento de sonar como el David Bowie de la época ‘Hours…’, hay bastante cohesión en el álbum, ningún tema parece fuera de lugar a pesar de que cuatro productores (Giles Martin, Mark Ronson, Paul Epworth y Ethan Johns) pasan por los controles, evidenciando que se han rendido ante las directrices de McCartney. Hay elementos de sonidos contemporáneos, con trazos de electrónica colocados cuidadosamente (salvo en la citada ‘Appreciate’), pero la base es eminentemente clásica. Si en las más enérgicas el resultado es un logro, también hay enjundia en los pasajes más tranquilos, como en la preciosa y acústica ‘Early Days’ o la ligeramente psicodélica ‘Hosanna’. Además no cuesta digerir el conjunto del álbum, con una duración que ronda los tres cuartos de hora. Por mucho que se haya aventurado a probar cosas nuevas, en el fondo todos deseamos que Paul siga ofreciéndonos retazos de su talento y su manera clásica de componer y aunque ‘New’ dista mucho de ser una obra maestra, se deja escuchar y querer. Aunque irremediablemente mira al pasado para tomar referencias, se planta en el presente con una vitalidad que ya quisieran muchos.
Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Queenie Eye’, ‘Early Days’, ‘Hosanna’, ‘Everybody Out There’.
Te gustará si: te gusta lo que Paul ha hecho tanto en solitario como con Wings
Escúchalo: Deezer