Coldplay serán, de nuevo, uno de los grandes triunfadores del año. Si bien las ventas de la banda sonora de ‘Frozen’ parecen inalcanzables (sí, este disco tan peregrino apunta a ser el más vendido en el mundo en todo 2014), ‘Ghost Stories‘ ha tenido una segunda semana bastante sólida. En la primera había vendido en todo el mundo 1 millón de copias. En la segunda, a pesar de la bajada en ventas en torno al 70% (lo común para un estreno de esta envergadura), su estatus de superventas ha bastado para sostener el número 1 en Estados Unidos y para bajar sólo al 2 en Reino Unido (posición que mantienen una tercera semana como se acaba de dar a conocer). Otras 300.000 copias según Mediatraffic que confirman lo que contábamos hace unos días: por la situación de la industria (y la ausencia de macrohit, de momento) podríamos estar ante el álbum menos vendido de toda la carrera de Coldplay, pero aun así, sus cifras están muy por encima de su competencia. La suerte del pelotazo ‘A Sky Full of Stars’ (no hay vídeo aún, ojo) será decisiva para el aguante del álbum el resto del año: no hay más singles claros en el disco, pero si el tema logra mantenerse en listas todo el verano, Coldplay podrían vender 3 millones de copias y tener uno de los 5 discos más vendidos de 2014 fácilmente. Recordemos que Arctic Monkeys, en uno de los mejores momentos comerciales de toda su carrera, están peleando por llegar a 2 millones con ‘AM’.
Aunque a años luz en cifras, el hombre del momento es Sam Smith. Se ha merendado la lista británica, desplazando a Coldplay al top 2 con ‘In the Lonely Hour’, repite top 1 en su segunda semana (!), ha logrado llegar a países tan difíciles para un novel como España, y lo que es más importante, es evidente que le espera un futuro en Estados Unidos, donde su disco sale el día 17. La aceptación de distintos singles en distintos países (de ‘Money on My Mind’ a ‘Stay With Me’, con ‘Leave Your Lover’ en espera) o el larguísimo recorrido de los bonus tracks colaborativos ‘Latch’ y ‘La La La’, en pleno apogeo en América, vaticinan que el disco tiene cuerda para rato. Difícil imaginar su techo ahora mismo, pues la vida del largo -lleno de baladas- se extenderá hasta Navidad.
130.000 copias en una semana son un gran éxito para un debutante como Sam Smith, pero 95.000 en todo el mundo para Mariah Carey son un enorme fracaso, uno de los mayores de toda su carrera. Por dos razones: las cifras de ‘Me. I Am Mariah‘ (etcétera) están muy lejos de sus estándares y no está muy claro que Mimi pueda arreglar el desaguisado con promoción y buenos vídeos futuros, en este momento sólo hipotéticos. El álbum no ha sido top 1 en su hogar, EE UU, a pesar de la falta de competencia, y ha quedado fuera del top 10 en mercados estratégicos como Francia, Alemania, Reino Unido o Japón. Extrañísima la estrategia de los múltiples retrasos del disco… para nada, y extrañísimo que no se aprovechara la buena aceptación de ‘#beautiful’ para lanzar el álbum inmediatamente después. Probablemente uno de los grandes despropósitos comerciales de la temporada: no sólo será este el primer disco de estudio de Mariah que no alcanzará el millón de copias (salvo milagro en forma de hit sorpresa) sino que llegar al medio millón va a ser un verdadero calvario según las previsiones de su semana 2: la bajada del 14 al 54 acaba de ser anunciada en UK.