El autor de ‘Yeezus‘ cree que existe una estrecha relación entre la lucha de la comunidad negra contra el racismo en los años 60 y la lucha actual de los famosos por su privacidad. «En los 60 la gente llevaba carteles con la frase «Muerte a los negratas». Sí, creo al 100% que existe una relación. Lo igualo a la discriminación y a la desigualdad».
El rapero apunta además que la diferencia entre él y los paparazzi es que la ocupación de West consiste en «ofrecer grandes cosas al mundo» mientras que la de los paparazzi consiste en «representar a la escoria e intentar ganar el máximo dinero posible mientras no tenga efecto en la ley». West concluye: «Soy la celebridad más inteligente con la que habéis tenido que lidiar en vuestra puta vida. No soy Britney Spears».
Cuando Golberg pregunta al rapero sobre su canción ‘Flashing Lights’, en la que utiliza la palabra «negratas» para referirse a los paparazzi, Kanye suelta su última perla: «Tienes que pedir un pase. No puedes decir esa palabra mientras yo esté cerca. Me ofende porque eres una persona blanca diciendo «negrata». ¿En qué medida van a repercutir estas declaraciones a la imagen pública de West? ¿Qué pensará de todo esto la famosísima Kim Kardashian, su mujer? ¿Y la pobre Britney, que recibe sin quererlo ni beberlo cuando lleva años alejada de los escándalos?