¿Lo consigue o no lo consigue? Esa es la cuestión. Sólo puntualmente. Situada en un barco y enfrentando al capitán feo pero ligón (Alfonso Lara) con su ex mujer cuando esta entra como pérfida y amargada nueva directora (Miren Ibarguren), tiene posibilidades contraponiendo al antipático y desastroso personal del barco (Rossy de Palma, Joaquín Reyes) con los posibles nuevos clientes que lleguen cada capítulo cual invitados de ‘Vacaciones en el Mar’.
De momento, sin embargo, la colección de gags y chistes ha sido más que justita, más cerca de las Matrimoniadas y Noche de fiesta que del disparate rocambolesco e hilarante de ‘Aquí no hay quien viva’ y ‘La que se avecina’ o el humor fino que llegó a hilar en varios momentos ‘Siete vidas’ gracias a la añorada Amparo Baró (soy incapaz de ir a votar sin recordar aquel capítulo en que «Sole», de IU, terminó votando al PP por error).
Hay lugar para algo de esperanza: el momento en el que Rossy de Palma se pasó por el coño las bragas de la pija o el momento en el que la directora se levantó el parche (de pirata, claro que sí) para mostrar su ojo perdido (“esto es lo mejor que vais a ver de mí”) no estuvieron mal, pero la contraposición entre gitano y jefe de seguridad dio pena mientras que la introducción de Angela Merkel y los chistecitos sobre Alemania estuvieron más en la línea de Ozores y Esteso que de ‘Bienvenido Mr Marshall’, provocando más sonrojo que carcajadas.
Mucho que afilar en los próximos guiones para llegar, siquiera, al nivel de ‘Aída’.
Calificación: 5/10
Destacamos: el juego que pueden dar en el futuro la idea y los artistas invitados
Te gustará si te gustan: lo mismo Moreno que ‘Aquí no hay quien viva’
Predictor: pelotazo, pero habrán de idear algo para mantenerse