Un nuevo amor después, además de un revitalizante viaje a Turquía y uno de los peores inviernos que ha visto Nueva York en los últimos años (el de 2014) fueron el punto de partida de este disco de título negativo pero resultado que no deberíamos rechazar. Porque Condon necesitó aquel invierno para encontrar estas canciones y el frío gélido que invadió la ciudad el año pasado capturó con acierto los tempestuosos últimos meses de su vida; demasiado bien, de hecho, como para que no jugara un papel esencial en la creación de este disco. Resulta interesante, por eso, que ‘No No No’ sea de todo menos invernal, pues estamos ante el trabajo más ligero de la carrera de Beirut.
Algunas críticas han rechazado este disco por sonar inacabado o falto de inspiración. Sin ir más lejos, la tercera pista, ‘At Once’, es un ejercicio de holgazanería incuestionable. Dadas las circunstancias, sin embargo, quizás deberíamos perdonarle a Beirut que se haya tomado este disco con un poco más de calma. Efectivamente, estos 9 temas y sus melodías y arreglos suenan sencillos y pensados sin demasiada ambición y, aunque ‘The Rip Tide’ duraba casi lo mismo, ‘No No No’ desde luego se pasa más rápido. Es un trabajo intencionadamente esquelético y sin pretensiones ni florituras innecesarias, y es una gozada precisamente por eso.
Llaman especial atención en ‘No No No’ las melodías de piano, insistentes en canciones de potente gancho como ‘Gibraltar‘ o ‘Fener’. La primera combina un riff especialmente inspirado con sutiles texturas electrónicas y una sección rítmica vibrante y medio tribal que ganan al oyente de lleno. La segunda, mi favorita del disco, de nuevo incorpora pianos rítmicos y cambia de tercio en su segunda mitad para seguir explorando de fondo esta faceta y añadir, a su vez, una nostálgica melodía de sintetizador. Ambos temas están conseguidos y son sólidos como una roca. De inacabados, la verdad, tienen poco.
Entre canciones tan estupendas como el single ‘No No No‘, que combina ritmos y melodías de carrusel con pianos, vientos metal, cuerdas y unos melodiosos «la la las» en el estribillo que serán un éxito en los futuros conciertos de Condon y compañía, se cuelan necesarios interludios instrumentales como ‘As Needed’, de hermosos pasajes que aportan un respiro a la intensidad emocional del álbum, y canciones más bien de relleno como la mencionada ‘At Once’, que prácticamente ni es una canción, o la olvidable ‘Pacheco’, de pobre melodía vocal.
Con todo, ‘No No No’ parece más un disco para fans que un álbum que pueda hacerle ganar seguidores al autor de ‘Gulag Orkestar‘. Sin clásicos como ‘Nantes’ o ‘Postcard from Italy’ por aquí, solo algunos de los temas mencionados y ‘August Holland’, una canción espectacular dotada de una orquestación esplendorosa, podrían rivalizar con las mejores canciones de Beirut. Pero los impetuosos metales y cuerdas de la final ‘So Allowed’ y el modo en que dialogan dan buena cuenta de que Condon todavía no ha perdido el norte y si ‘No No No’ no nos dará ningún clásico, por lo menos sí ofrece media hora de exuberante entretenimiento. Un sí, sí, sí, este disco, por mucho que otros digan que no.
Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Gibraltar’, ‘No No No’, ‘August Holland’, ‘Fener’
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