El partido de Mariano Rajoy no solo ha ganado las elecciones sino que ha obtenido más votos que el pasado 20 de diciembre a pesar de los recientemente descubiertos casos de corrupción, el último de ellos, hace solo cinco días. Estos resultados solo se entienden asumiendo que España es un país de sadomasoquistas y que nos gusta que nos den bien. Por eso no podría ser más apta esta canción de Los Punsetes. «Me gusta que me pegues / me siento importante», canta el grupo. «Encuentro tus hostias fascinantes / y no me defiendo / por no molestarte / prefiero dejar que corra la sangre». Muy apto.
Los primeros votos escrutados daban victoria a la coalición Iglesias-Garzón por encima del partido de Pedro Sánchez. Casi, casi se confirmaba el sorpasso. Sin embargo, finalmente el PSOE remontaba con bastante diferencia respecto a Unidos Podemos y se confirmaban dos cosas: el regreso del bipartidismo y la confianza del pueblo a los partidos viejos por encima de los nuevos. En ambos casos nos viene bien esta bonita canción de Astrud, ‘He vuelto’, en la que el dúo canta que «al final no es para tanto / ya vuelvo a estar aquí / ya vengo a verte otra vez». Nos imaginamos a Sánchez, que es el indie de los cuatro
candidatos, cantando esto encerrado en su despacho. «No sé si me explico, no sé / esta vez si pasa algo / la culpa ya no es mía, es de ambos / He vuelto / ¿ves qué bien? / qué suerte tengo / y tienes tú también».Toda la confianza depositada en Unidos Podemos se iba al garete tras el sorpasso del PSOE respecto a las encuestas. Los resultados han sorprendido enormemente: la coalición ha sido la fuerza más votada en Cataluña y Euskadi pero en absoluto se ha acordado de ella el resto de España. Por eso, aunque el partido de las sonrisas y la ilusión prometa seguir luchando por el cambio, ahora toca llorar y ‘¿Quién me querrá?’ de Christina Rosenvinge captura con atino la emoción con la que debe estar lidiando Unidos Podemos en este momento. «¿Quien me querrá? / con lo cara que está la vida / ¿quien se querrá arriesgar?», se preguntan Iglesias y Garzón hoy. «En cada despedida nace la eternidad / ¿quién me hará sonreír? / ¿quien cuidará de mí / si tú te me vas?»
El batacazo de Albert Rivera se merece una canción de amor incondicional para su consuelo como es ‘Ojo por diente’ de Klaus & Kinski. «Aunque te corten una pierna te querré», entona Marina. «Aunque te falte algún ojo, te querré / aunque gestes en tu vientre al hijo de Satán / te querría igual». El grupo lo tiene claro: cuando amas a alguien no importa que pueda ser el mismísimo Lucifer. «Aunque no me digas siempre la verdad / la verdad es que yo no digo siempre la verdad / aunque escondieras un demonio marsupial / que acabe por saltar y me quiera atacar / y me dijera que me va a asesinar / yo te querría / sin duda, sin dudar».