Sin embargo, en la actuación hay dos partes diferenciadas, una claramente en directo (otra cosa es la afinación) y otra que parece programada deliberadamente en playback. Lo que casi todos los medios haciendo sangre de esto omiten es que lo más probable es que el artista planeara una actuación mitad en playback mitad en vivo, algo ya asumido en las ceremonias de premios, y que hemos visto hacer, ya varias veces, a Rihanna y a Justin Bieber sin ningún tipo de pudor. Cuando les apetece se incorporan a un coro o a un estribillo, mientras de fondo suena otra pista. Cuando no, bailan sin más. Si no era esa la intención de Enrique Iglesias, es bastante extraño lo que sucede. ¿Dónde está la pista vocal pregrabada durante los primeros segundos? ¿De dónde sale todo ese eco si no pensaba cantar nada de nada? ¿No está totalmente claro al principio que eso un playback no es? ¿No dan una pista esos manotazos que le pega al micrófono?
Lamentablemente, Enrique Iglesias no ha querido comentar el asunto en las redes sociales, a diferencia de Iggy Azalea y Mø, que después de un caótico semi-playback en la televisión americana, acudieron raudas y veloces a explicar que habían tenido un problema con el pinganillo.
Aquí el semiplayback de Rihanna en los MTV VMA’s, que ha subido orgullosa a su canal de Youtube. Como se puede apreciar claramente, a veces canta, a veces no. El verdadero debate es: ¿nos estamos acostumbrando demasiado a esta fórmula?