En relación al mensaje de la letra, Kesha ha tenido una idea curiosa para el vídeo de la canción, que es replicar, en el presente, a sus 30 años, algunos de sus VHS familiares, en los que aparece de niña bailando, haciendo boberías o jugando a las marionetas. La idea permite a la artista conectar de nuevo con su niñez tras un pasado turbulento, y recuperar así el lado puro de su ser que aún no se había corrompido por la experiencias de la edad adulta.
Ha dirigido el vídeo Isaac Ravishankara, con quien Kesha ha trabajado en otro vídeo que no ha salido todavía, ‘Hymn’, como ha explicado en una carta para acompañar el vídeo. “Quería que este vídeo tuviera un punto nostálgico y fantasioso porque va sobre mí conectado de nuevo con mi inocencia infantil”, ha asegurado. “’Rainbow’ me representa a mí, Kesha Rose Sebert, mi nombre sin el signo de dólar, realmente por primera vez”.