En una radio local de Tucson, en el estado de Arizona, una antigua colega de Fisher, la actriz Heather Ross, ha contado que Fisher tenía “tolerancia cero” ante el acoso sexual y que eso se reflejaba en el modo que la actriz protegía a compañeras que lo habrían sufrido. Ross ha contado que advirtió “avances inapropiados” por parte de un productor de Hollywood ganador de un Oscar hacia ella -que no era Weinstein-, y que cuando Fisher se enteró, se puso “furiosa”, así que tuvo una extraña idea para espantar a esta persona y que no volviera a acercarse a Ross nunca más: regalarle una lengua de vaca.
Ross cuenta que Fisher entregó la lengua de vaca a este productor en persona en el interior de una caja y que se quedó para verle abrirla. La caja contenía un mensaje: “como vuelvas a tocar a mi querida Heather o a cualquier otra mujer, la próxima entrega será algo tuyo, y en una caja mucho más pequeña”. “Fisher era así”, ha contado Ross. “Ella estaba ahí para defenderte, y la echo de menos”.