Estrons practican un punk-rock furioso y lleno de energía (no en vano han girado con Slaves), como se percibe del pegadizo single ‘Drop’, de la que destaca la melódica voz de una Tali que cambia de un vibrato elegante a un registro roto en un pestañeo. El grupo dedica canciones a los altibajos adolescentes y especialmente excitante es ‘I’m Not Your Girl’, inspirada en una conversación entre dos chicos que presumían de ligues. “Solo porque dije que quería, no significa que lo tengas que dar por hecho”, canta Tali. “Escúchame bien, como no preguntas, ya te lo digo yo: no soy tu chica. Todo está en tu cabeza. No es real”.
El grupo galés dedica un tema a ‘Belfast’ y otro a Glasgow (‘Glasgow Kisses’) y ambos presentan guitarrazos purgantes, pero también es capaz de construir temas tan épicos como ‘Strobe Lights’, que en sus palabras “trata sobre las tensiones entre el amor y los celos, y las consecuencias cuando uno derrota al otro». «A veces hacemos cosas locas para probar nuestro amor el uno por el otro, no importa cuán nihilista», apunta. En el tema, Tali canta obsesivamente “haces que me vuelva loca”. Su música aspira a tener el mismo efecto.