Publicamos la larguísima entrevista mantenida con Pucho (cantante) y Guille (uno de los 2 autores principales), en la que hablamos al detalle sobre casi cada una de las canciones del disco, sobre los añadidos de Dave Fridmann, algo más que un simple mezclador en este caso, y sobre su posición en la industria musical.
¿Qué significa este disco para vosotros?
Guillermo: «Vivimos este lanzamiento con la calma de haber hecho un trabajo que cumple con lo que queríamos: un proceso distinto de componer, grabar, arreglar… en el que nos hemos encontrado con muchos hallazgos. Nos ha enseñado mucho, hemos crecido mucho como banda, a nivel personal, humano… y a nivel sentar bases para el futuro».
Suena como un viaje hacia el futuro sin renunciar a vuestro sonido primigenio.
Pucho: «Tras el disco anterior, girando por todos lados, llegas a casa, paras y ves todo lo que ha pasado. Llevamos 3 discos haciendo las cosas de la misma manera y lo que hemos hecho ha sido sentarnos en un diván de psicoanalista, analizar los 20 años que llevamos juntos, y reformularnos. Cuando miras hacia adelante, claro que te encuentras siempre cosas del pasado. Es bonito y ves ese pasado desde el lugar de ahora. Como cuando ves las primeras películas de directores renombrados y te das cuenta de que ahí ya estaban sus coordenadas. Es interesante que se te crucen las historias porque forman parte de tu identidad: vas evolucionando y a la mochila vas añadiendo experiencias».
«‘Mismo sitio, distinto lugar’ es el final de un proceso, un regreso a casa, pero esa casa a la que vuelves no es la misma casa, sino que es un nuevo punto»
La canción final del disco, ‘Mismo sitio, distinto lugar’, es como vuestra historia, y tiene alguna frase que, si os separarais, alguien diría: «lo dejaban ahí anunciado»… (NdE: ponen cara de sorpresa)
G: «El disco acaba como empieza, pero nos dimos cuenta a posteriori. El último acorde de ‘Mismo sitio, distinto lugar’ es el comienzo de ‘Deséame suerte’. Son dos canciones que parten de cosas distintas pero vuelven al mismo punto. ‘Mismo sitio, distinto lugar’ es el final de un proceso, un regreso a casa, pero esa casa a la que vuelves no es la misma casa, sino que es un nuevo punto. También es una canción que cierra de manera emocional, porque aunque hable de una persona a la que se interpela, cuando terminé de escribirla, me di cuenta de que hablaba de nosotros como banda, como amigos y como personas. Estábamos viviendo ese momento de romper con ciertas cosas para empezar otras. Y empezar con ciertas cosas no es borrarlas, forma parte imprescindible de lo que eres. Lo que sí hay que ver son las cosas que están oxidadas y que empiezan a ser lastres».
P: «Elegimos esta canción como título del disco porque el disco es emprender un camino, una búsqueda. Todo el disco está regado por la incertidumbre de lo que iba a pasar en la grabación, de lo que iban a ser las mezclas. Hubo varias versiones de esta canción y al final hicimos como un cóctel de todas las propuestas. Nos pareció el hallazgo de todo el camino emprendido con ‘Deséame suerte’, y nos parecía que daba título a todo el proceso».
G: «Sintetiza lo que es el disco: tenerlo todo grabado y cuando lo tienes todo decir: «venga, vamos a empezarlo otra vez, nos vamos a quedar solo con lo esencial. Fue una de las mezclas más emocionantes. Cada día grabábamos una canción y hasta que no terminábamos no pasábamos a la siguiente, que es algo bastante extraño hoy en día porque normalmente se graba por pistas, por músicos. Y eso nos hacía tener la sensación de que quien guiaba era cada canción. Cada canción era un universo en sí mismo. Para terminar esta canción, ‘Mismo sitio, distinto lugar’, en vez de un día estuvimos dos, y se nos pusieron de corbata, porque poníamos en riesgo todo lo que venía después. Pero atrevernos a desmontarla y volverla a empezar mereció la pena».
La canción habla claramente de vosotros, pero la pregunta es por qué suena triste.
P: «¡A mí no me suena triste!».
G: «Es de las más a pecho descubierto y que Pucho ha cantado de una manera más hermosa. Está muy cerca de la realidad que estamos viviendo. Lo que se puede percibir como tristeza, lo percibimos como una verdad absoluta: ser capaces de desnudarnos y de ser honestos con todo lo que nos está pasando. Hay un momento en esa canción que incluso es casi infantil, el puente en el que aparecen los sintetizadores. Hay unos arpegiadores de ‘La historia interminable’ que queríamos que sonaran exageradamente altos y que llevaran el peso».
P: «La letra hace alusión a ‘La Cuadratura del Círculo’ del primer disco».
G: «También tiene unos arpegiadores de ‘Deséame suerte’, aunque la estructura no es la misma, hay algo parecido.
P: «Volviendo al principio, sí es cierto que puede empezar melancólica, pero yo no la veo triste, cuando digo «es mi turno», «esta estrofa para mí», hay un poco de egoísta, de «ahora yo», salen los timbales… Me emociona».
«Es verdad que este disco es más descarado, tocamos muchos palos, y hay un palo que es la sátira y la ironía como salida ante una situación tan dramática como la que estamos viendo como sociedad»
Igual me parece triste en contraste con ‘Palmeras en La Mancha’, con frases como «su mujer llevaba la misma doble vida que él». Me parece una canción divertida, muy atípica para vosotros, ¿o vosotros la veis muy Vetusta?
P: «El punto costumbrista siempre ha estado en Vetusta, desde ‘Cenas ajenas’, que era un pavo mirando por la ventana a sus vecinos de enfrente, rollo voyeur, con las pantuflas. También ‘Tour de Francia’ del último disco, que es estar viendo la tele en verano en tu casa tocándote los huevos. O ‘Fiesta mayor'».
G: «Es verdad que este disco es más descarado, tocamos muchos palos, y hay un palo que es la sátira y la ironía como salida ante una situación tan dramática como la que estamos viendo como sociedad. Es necesaria. Dijimos: “vamos a atrevernos a hacer una canción con otro código, mantenemos una manera de escribir, pero cambiando el punto de vista”. El inicio del disco es ciertamente desconcertante, con esta y ‘El discurso del rey’, que de primeras te descoloca. La decisión de que abran el disco estas canciones es dar como un bofetón. Y luego con ‘Consejo de sabios’ y ’23 de junio’ te vas metiendo en el mundo Vetusta… pero ‘Te lo digo a ti’ te vuelve a sacar. Hemos intentado mantener la tensión y no permanecer en zonas ya transitadas, y hemos hecho un esfuerzo para que el oyente no se sienta cómodo escuchando y haga un trabajo de asimilación del disco».
«Negar un conflicto en un grupo de trabajo es esconder las cosas y nosotros queríamos que se viera que hay confrontación en el grupo también»
¿’Guerra civil’ está cantada desde el punto de vista de alguien que busca la confrontación?
P: «Es sobre la manía de buscar enemigos fuera, lo que luego continúa en ‘Te lo digo a ti’. Pero también es una confrontación con uno mismo: por lo que llevamos dentro esparcimos la mierda alrededor. En el disco hay mucho duelo del yo con el tú, hay mucho careo, y como colectivo que tiene que tomar decisiones continuamente, hay conflicto. Negar un conflicto en un grupo de trabajo es esconder las cosas y nosotros queríamos que se viera que hay confrontación en el grupo también».
G: «Después de muchos años, cuesta llegar a una estética común, pero cuesta más todavía, siendo 6 personas, decir «vamos a ver dónde podemos incorporar cosas». Y hasta que se pone en común, ha habido tensión creativa y personal entre nosotros, que es normal, que a veces tendemos a tapar los conflictos como algo negativo, y mediante la empatía se llega a cosas fantásticas. Hemos llegado a un tercer punto que a lo mejor no es donde queríamos llegar ninguno de los 6, pero donde nos sentimos identificados, y todos hemos puesto una parte».
¿Quiénes podéis chocar más?
G: «No es una cuestión personal, de uno contra otro, sino del día a día, de tomar decisiones y desecharlas. Muchas decisiones son desechar, ideas hay muchas, pero cómo cribas… nos ayuda mucho Campi (Campón), el co-productor. Había mucha incertidumbre, hemos trabajado en 3 países, nunca hemos hecho un disco tan nuestro desde el principio al final.
«Dave Fridmann no trabaja a distancia, es una de las premisas que dijo (…) Es la primera vez que trabaja con un grupo español, y nos pidió todas las letras traducidas»
No me has contestado, pero bueno… (NdE: dicen que sí). ¿Habéis trabajado cara a cara con Dave Fridmann o por mail?
G: «Él no trabaja a distancia, es una de las premisas que dijo, y nos gustó eso mucho. No era como «te lo mando y si no te gusta, lo desechas». Nos dijo que teníamos que ir para allá».
Escuchando el disco se le percibe como en el efecto de «ha sido mágico» de ‘Deséame suerte’, otros efectos, teclados en ‘Guerra civil’, la parafernalia de ‘El discurso del rey’… pero no sé si esas ideas eran vuestras. Al fin y al cabo, él no ha producido el disco…
G: «Él sabía que queríamos incorporar sonidos. Los 3 primeros discos eran una fotografía de lo que hacíamos en el estudio o en el directo, y queríamos huir del sonido de 6 personas tocando en una habitación. Siempre hacíamos las canciones para tocarlas en directo, y eso te restringe mucho. Y aquí dijimos «vamos a olvidarnos de los conciertos y usar la celesta de los años 30 que hay en Hansa (Studios)». Intentamos que todos los sitios por los que íbamos pasando aportaran algo, y que a pesar de las aristas, hubiera una unidad. Fue muy fácil (trabajar con Dave), cualquier cosa que le pides lo intenta. Es la primera vez que trabaja con un grupo español, nos pidió todas las letras traducidas…».
¿Quién las tradujo?
G: «Elvira Sastre, la poeta que siempre nos traduce todas las letras al inglés. Para él era un reto».
P: «Nos dijo que pulsáramos el botón de «te has pasado» cuando quisiéramos, porque la dicción del castellano no es la misma y hay efectos que no van igual. Muchas veces nos pensamos que se puede hacer cualquier cosa en inglés o español y no es así. Dijo: «yo sé que en España y en otros países de Europa, el tratamiento de la voz se hace de otra manera». Y le dijimos: «no, no, estamos aquí para ponernos en tus manos. En el momento en que algo nos chirríe y no se entienda, se desvirtúe… ya te lo diremos»».
G: «El «ha sido mágico» fue un momento chulo, porque «mágico» lo asociábamos con «ensoñación, algo increíble», pero él el «magic» se lo llevó a un momento más «creepy, oscuro». Es casi terrorífico, como un conjuro».
P: «Yo quería deslocalizar las sílabas, la esdrújula de «mágico». Se lo llevó a otro lado y moló un montón también».
Entonces Dave sí ha producido el disco por lo que decís…
¿Dave tenía alguna canción favorita?
G: «No, él es súper pro, le encantaba lo de El Mundo Today (de ‘Palmeras en la Mancha’). Le tuvimos que explicar lo que era El Mundo Today, que era una gente que hacía sátira, y con un programa de radio. Hicimos dos versiones de «Palmeras» por si nos echábamos atrás, una con el boletín y otra sin él. Ya nos hemos hecho, pero al principio era bastante desconcertante que apareciera un boletín. Cuando (Fridmann) escuchó el disco, nos dijo: “me gusta esto, me gusta lo otro”, pero también: “¡Qué bien que los chicos de las noticias siguen en el disco!”» (risas).
’23 de junio’ es de las canciones que más me ha gustado, es bastante bucólica, campesina, con la imagen de recoger los granos de arroz, etcétera. ¿Qué me podéis contar sobre ella?
G: «Es… no sé si decir popular. Primero hice la música y luego la letra, y sí tenía la sensación de estar en una especie de ceremonia. Los granos de arroz los asocié a una ceremonia. El momento de guardar los granos de arroz es como guardar la felicidad. En esa canción, todo lo que tenía que ver con el ritual funcionaba fenomenal. El solsticio, San Juan, el arroz… hacía que te metieras en algo muy familiar, que tiene que ver con el ritmo de vals, el ambiente mediterráneo…»
P: «Los coros están en reversa, y es como estar alrededor de una hoguera».
G: «Tiene un toque ancestral, David dice que es un vals retrofuturista, costumbrista, pero como contado desde el futuro por el arreglo. Es la canción que tiene la celesta de Hansa… Está hecha como en pedacitos».
Seguís haciendo las letras Juanma y tú, Guille, supongo. ¿Hay alguna canción específica que hayáis escrito pensando en Pucho?
G: «Inconscientemente haces ese ejercicio, tenemos integrada su manera de hacer para escribir».
P: «A veces les doy guerra, hay canciones que no han salido porque llego yo y choca».
G: «‘Deséame suerte’ sabíamos que le iba a encajar, ‘Consejo de sabios’ dio guerra la letra pero la melodía era muy suya. ’23 de junio’ fue un reto, le dije: «Pucho, he hecho un vals». Y dijo: «¿Y cómo canto esto?». Su trabajo interpretativo es muy importante, me sorprende hasta donde llega».
Pucho: «Siempre busco otras tesituras, he ampliado el registro, en este disco he dado las notas más agudas y las más graves»
Está el falsete de ‘Guerra Civil’…
P: «¡R&B! (risas). Llevo trabajando la voz desde el primer disco, doy una clase semanal con mi profe, Patri Ferro. Siempre busco otras tesituras, he ampliado el registro, en este disco he dado las notas más agudas de mi tesitura y las más graves».
G: «Eres un pedazo de intérprete, lo que se propone lo clava».
La verdad es que es alucinante oír el directo que grabasteis, no sé cuánta post-producción habrá, pero parece toma de estudio.
P: «Hago un trabajo específico para las nuevas canciones en estudio, y cuando toca el directo, sobre el repertorio focalizado. No es lo mismo prepararte para un disco, que tienes que ser preciso con la afinación, que un directo, que te preparas más para resistencia vocal. Para este disco quería buscar algo fuera de la voz. Con una guitarra tienes pedales, y yo quería tratar efectos. En muchas canciones, como ‘Consejo de sabios’, quería meter una voz tremulosa, que al final se metió un Leslie. Quería explorar algo físicamente».
¿’Consejo de sabios’ de qué va? Es de las que menos claro lo tengo.
G: «Quisimos terminarla en Berlín, porque es una ciudad de capas superpuestas, La Guerra Fría, el Muro de Berlín, la contracultura… y nuestro proceso creativo ha ido de derribar fronteras. Es la historia de alguien que se da cuenta de que no le quedan constantes vitales y que necesita cruzar la jaula que tiene puesta. Se da cuenta de que la jaula es autoimpuesta, no es culpa del de enfrente, sino que él la ha puesto ahí. Esa canción tiene mucho trabajo de adecuarse musicalmente. Tiene 3 partes, en la coda final cambia el patrón rítmico y toda la narración se convierte en acción: el protagonista pide salir de la jaula, romper con todo eso».
«Tampoco estábamos pensando en las radios (cuando escogimos el single)»
La última vez que os entrevisté, escogí como titular cuando decíais que la radiofórmula había perdido el contacto con la realidad. Ahora lo ha recuperado en parte, y oímos en la radio a Love of Lesbian, C. Tangana, Lori Meyers no…, Sidonie sí. Pero parece que vosotros habéis escogido un single para no salir en Los 40.
G: (risas) «Sí… el disco es muy distinto, es difícil decidir qué canción representa a las otras 9, porque hay que escucharlo en su totalidad. Para decidir el single no pensamos en si queríamos o no queríamos salir en la radio, sino lo que queríamos comunicar a la gente. Nos parecía que las cosas más valientes del proceso eran la sonoridad, el desconcierto. Teníamos necesidad de salirnos de la vía, queríamos dar un bofetón… y ya habrá tiempo para escuchar el resto».
P: «Se lo encargamos a Nacho Vegas el bofetón» (se ríe, en referencia al vídeo).
G: «Pero tampoco estábamos pensando en las radios. La canción es número 1 en una radio de Colombia, ha tenido muchos streamings, es verdad que las radios comerciales no la han tocado, pero no sé… Creemos que es uno de los hallazgos del disco».
De los famosos del vídeo, ¿escucharon todos ‘Te lo digo a ti’? Lo digo porque tiene su interpretación política…
G: «La escucharon antes todos. Nacho Vigalondo habló con ellos, no sé cuál fue la cronología, se les mandó la canción y les pareció bien».
No os quiero preguntar mucho por el paso a Sony, porque ya dejasteis claro que no iba a interferir en el proceso creativo, y se ha visto en este single, ¿pero qué os pareció cuando en los Premios MIN os metieron en el In Memoriam por ya no ser indies?
G: «Estuvimos ahí, fue divertido».
P: «Fue muy gracioso… A mí lo que no me gustó fue que metieran ese tipo de bromas en un In Memoriam».
G: «Cuando todo giraba en torno a Gata Cattana…»
P: «Ahí sí me pareció un poco mal, un poco falta de respeto, pero de la broma en sí nos reímos, es gracioso».
G: «De todas formas ha cambiado poco realmente. Es verdad que ha habido una ampliación del equipo para llegar a sitios como Latinoamérica, que nos costaba la vida, cerrar cada tienda de discos una a una… eso ha cambiado bastante. Pero es verdad que sigue el equipo de antes».
La última vez que os entrevisté recomendasteis a Novedades Carminha, y ahora llenan Joy Eslava. Dadme otro grupo underground que vaya a petar dentro de 3 años.
P: (se ríe) «No sé… He oído mucho a Melange, gente que viene de una banda de kraut-rock, creo que de Madrid».
G: «Rufus T Firefly fueron teloneros de nuestra gira pasada. Tienen mucho futuro por delante».
Pucho, te vi en Tomavistas, Breeders… me da la sensación de que sales bastante. ¿Cómo es Madrid para alguien que llena estadios de 15.000 personas en la misma ciudad? ¿No es agobiante la cantidad de selfies que pueden pedirte?
P: «Yo no me siento agobiado, aunque salir en fin de semana no es lo mismo que entresemana, igual en fin de semana te reconoce más gente. Salgo a fiestas populares, Las Vistillas, San Isidro, y tampoco… no sé…»
G: «Somos reconocidos por las canciones, más que por la imagen. ‘Deséame suerte’ es casi la primera vez que salimos en el vídeo claramente desde principio a fin».
P: «En Breeders vinieron un par de personas a pedirme foto, pero no trasciende mucho más… Es llevadero».
Vuestro primer disco es el disco más viejo de todo el top 100 semanal de streamings. Es alucinante, puede llevar 10 años siendo lo más escuchado semana a semana en el país…
P: (flipando) «¿Lo más oído de la semana o de la historia?».
Lo más oído cada semana… 10 años después.
P: «No lo sabíamos. ¿Puede que sea por el nuevo?».
Bueno, Taylor Swift ha sacado disco a la vez que vosotros y no por ello están los viejos
G (a Pucho): «¡No te quites mérito!».
¿Cómo recordáis el debut? ¿Con cariño?
P: «Claro, por todo lo que significa, pero me mola el momento que estoy viviendo ahora. Suena a tópico pero al final el nuevo es el que más presente tienes. ‘Un día en el mundo’ no deja de ser hijo tuyo pero lo ves a veces en la lejanía».
Finalmente, ¿quién ha escrito vuestra nota de prensa? Hay frases que no se entienden, como «El drama es zaherido por la ironía, la sátira y el descaro». ¿Qué es esto?
G: «¡No sé, tío!».
Ambos: «¿Qué es «zaherido»?
Pues he tenido que buscarlo, «zaherir» era algo así como humillar a alguien.
P: «¡A ver si es una errata!».
G: «Habrá partido de la oficina, yo no la he escrito, las notas parten de un argumentario. ¡Pero lo anoto!».