En una versión acústica que, lejanamente, podría recordar a los giros vocales de Jeff Buckley, el adolescente de 18 años Oskar Proy
interpretó la canción y, enseguida, pese a cierto descontrol vocal –probablemente derivado de sus nervios– cautivó a los miembros del jurado Joe Jonas y también a Delta Goodrem. Kelly Rowland y Boy George, en cambio, no presionaron sus pulsadores, aunque celebraron la interpretación del chico.La historia de su rara elección tiene, además, un componente emotivo que ha terminado de viralizar su actuación. Como ha explicado en Facebook, Proy eligió este emotivo himno como homenaje a su abuela, asturiana de nacimiento. El joven aprendió la canción para cantársela a su abuela, que padece demencia, y su padre le ayudó en la traducción para entender y adaptar el tema. Una adaptación en la que, no ya es que se zampe alguna que otra estrofa, si no que, de manera bien raruna, pasa de “quién estuviera en Asturias en todas” a “que la ponga en el balcón”. A expensas de saber cuál será la evolución de Proy en el concurso, le auguramos un gran futuro cantando su versión “guiri” en los mejores chigres restaurantes céntricos del Principado de Barcelona.