El pasado mes de noviembre, Allen reveló que preparaba sus memorias y explicó que estas serían “chocantes” y “brutales”. En ellas hablará sobre la adicción al alcohol y a las drogas que ha sufrido en el pasado, sus desórdenes alimenticios, el aborto que sufrió en 2010 o su divorcio, además de los “altibajos” de la fama, que Allen experimentó a una edad muy joven (la cantante publicó su primer disco cuando tenía 21 años).
Las memorias de Allen llegan en un buen momento profesional para la cantante, después que su último disco, ‘No Shame‘, haya sido nominado a un Mercury Prize, uno de los premios musicales más prestigiosos que se entregan en Reino Unido. Sin embargo, el disco se ha quedado lejos de ser uno de los mejores valorados de su carrera.