Que este es un disco político no va a sorprender a nadie que atienda a su título o haya oído los singles ‘Shot Gun Shack‘, contra las armas; y ‘Kong‘, que abiertamente habla de la historia del colonialismo y de la crisis de los refugiados. ‘Poem Daddy’, pista 3, es un interludio en el que recordamos un texto de Suliaman El Hadi, quien fuera miembro de The Last Poets, un colectivo de poetas y músicos que lucharon por los derechos civiles afroamericanos desde finales de los 60. Entre las cosas que oímos, «la depresión es peor que la tumba / mejor morir por una noble causa / que vivir y morir como esclavo».
La lucha de Neneh Cherry no es agitada, pues apenas un par de canciones como ‘Natural Skin Deep’ contienen algo de nervio. Más bien la artista se ha sentado a pensar, un tanto alicaída, sobre la mierda de mundo que la rodea. En la primera canción, ‘Fallen Leaves’, parece dirigirse hacia sus gobernantes al decir «solo porque me sienta mal / no aprovechéis para pasarme por encima»; mientras otras canciones retratan más una situación de dolor que llaman furiosamente a la acción. De hecho, a veces el mensaje se pierde entre el puñado de letras. En ‘Kong’, la canción sobre los refugiados, está claro lo que quiere decir la frase «arráncame la cabeza de un mordisco, y aun así mi mundo siempre será un riesgo que merezca la pena tomar», o la referencia exacta a «Italia y Francia» en la crisis de refugiados del Mediterráneo («cada país busca amigos en Francia e Italia y en los siete mares»); pero su insistencia por recordarnos su signo zodiacal (Piscis, Neneh Cherry nació un 10 de marzo) nos saca de ‘Synchronised Devotion’ más que nos mete; y un tema llamado ‘Deep Vein Thrombosis’ más que reflexión o despertar social, provoca extrañeza.
Hay grandes historias dentro de este disco: ha tocado el pianista y vibrafonista de 83 años Karl Berger, quien colaboró con Don Cherry, padrastro de Neneh; la portada es del artista Wolfgang Tillmans; el título de ‘Shot Gun Shack’ proviene de algo que dijo alguien en el funeral de Ornette Coleman, de quien a su vez se ha sampleado un tema de 1969 llamado ‘Growing Up‘ en ‘Natural Skin Deep’. Pero Neneh Cherry no siempre ha conseguido traducir toda esta delicatessen en algo memorable, desperdiciando por ejemplo una gran base, una buena melodía y un buen teclado como los de ‘Faster than the Truth’ con una toma vocal improvisada y grabada de mala manera que no contribuirá a que el tema circule más rápido y mejor que las «fake news».
Quizá pretendiera ser irónica al respecto, pero ‘Broken Politics’, como disco político, es mucho mejor cuando su mensaje es comprensible, no inasible. En todo caso, su dirección artística supone un nuevo acierto, con el punto justo de guiños a sus inicios trip-hop (‘Kong’ está co-producida por 3D de Massive Attack, ‘Shot Gun Shack’ tiene cierto espíritu en común con la mismísima ‘Safe From Harm’ y también contiene un ritmo parecido la inicial ‘Fallen Leaves’), a su desarrollo de la última década con músicos de jazz (‘Natural Skin Deep’) y también otras sonoridades en las que no estamos tan acostumbrados a oír a la co-autora de ‘7 Seconds’. Todos estos estilos, del más británico al más oriental pasando por el más africano, sí que están amalgamados de manera exquisita.
Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Soldier’, ‘Kong’, ‘Shot Gun Shack’, ‘Natural Skin Deep’
Te gustará si te gusta: Massive Attack, Four Tet, Björk, Karl Berger
Escúchalo: Spotify.