El Ayuntamiento asegura que buscará otro emplazamiento como informa El País, que también entrevista a Galán, uno de los creadores del show, para el que habían comprado entradas miembros de grupos de ultraderecha, como se han jactado estos mismos en las redes sociales. «Curiosamente, este espectáculo está más centrado contra la izquierda, con lo que lo mismo hasta les gustaba. El miedo no es que vayan con silbatos o vuvuzelas, sino que algunos desde España 2000 han amenazado con llevar otras cositas», ha indicado al diario.
Por su parte, la Revista Mongolia emite un largo comunicado en el que «acatan» la decisión, pero no la «comparten». «Es más: nos parece una grave equivocación en una democracia que quiera ser digna de este nombre. Valoramos y agradecemos los esfuerzos realizados por La Rambleta y sus trabajadores para seguir adelante con la actuación, pero no comprendemos que las autoridades no sean capaces de garantizar la seguridad. Es inimaginable en una sociedad democrática que las amenazas de un pequeño grupo violento e intolerante fuerce la suspensión de actividades culturales de forma continuada sin que las autoridades actúen para evitarlo. Nos resulta incomprensible que un país capaz de garantizar la seguridad en Mundiales de fútbol, Juegos Olímpicos y ahora incluso nada menos que en la final de La Copa Libertadores de América sea incapaz de garantizarla en un espectáculo de dos humoristas en un teatro de titularidad municipal moderno y de excelencia».
Además de agradecer las muestras de solidaridad, el comunicado menciona que este no es un hecho aislado. «Se produce muy poco después de una decisión análoga ante el show de Dani Mateo, Cimas y Vaquero, lo que añade si cabe más gravedad a una situación ya muy grave de por sí. Cada suspensión refuerza a los intolerantes, que ven cumplidos sus objetivos y se envalentonan ante la siguiente campaña, debilita la democracia y erosiona sus principios fundamentales». Entre quienes se han solidarizado con ellos, Eva Hache, Santiago Segura o Amaral a través de sus redes sociales.